Vacaciones 2007, el viaje (cuarto día).

Martes 27, hoy va a ser un día complicado, ya que habrá que tomar decisiones en cuanto tengamos información sobre el incendio ocurrido ayer.

De todas formas tenemos programada la ruta León > Astorga > Ponferrada > Santiago de Compostela, total unos 330 km, así que tampoco es una ruta muy larga, por lo que nos tomamos la cosa con calma.

Para hoy también teníamos previsto comer un “cocido maragato” típico de Castilla/León, así que nos dirigimos al pueblo Castrillo de los Polvazares (precioso este pueblo, pondré algunas fotos en los próximos días) donde dicen que existe uno de los mejores sitios para degustar este plato, al llegar resulta que el sitio está cerrado y no queda otro remedio que irnos, en el mismo pueblo, a otro restaurante donde también sirven esté cocido, para que os hagáis una idea en qué consiste este plato, a continuación os pongo los ingredientes:

Ingredientes: 300 gr. de morcillo de cabrito Media gallina 300 gr. de lacón Una oreja, un pie y un trozo de morro de cerdo, troceados 250 gr. de cecina Chorizo y 150 gr. de tocino 1/2 Kg. de garbanzos Medio repollo 1/2 Kg. de patatas Dos dientes de ajo 100 gr. de fideos Aceite de oliva, sal

Hay que decir que lo que sirven para cuatro personas, serviría perfectamente para ocho, además una vez que has terminado con todo esto, si es que puedes, te sacan como postre una especie de flan con galletas en una cacerola de la cual pueden comer otras 6 o 7 personas (se come en plato sopero), en definitiva una barbaridad de comida, además pan vino café y chupitos, todo por la módica cantidad de 53 euros las cuatro personas.

Bien, después de esta gran comilona, mis cuñados a la vista de las noticias que están recibiendo deciden regresar esta misma noche a Palma, así que emprendemos regreso hacia la estación de tren de León, yo y mi mujer de momento decidimos continuar, ya que ellos tienen decidido el próximo domingo venir a Madrid y así poder irnos juntos a terminar las vacaciones en Lanzarote, tal y como estaba previsto.

A las seis de la tarde les dejamos en el tren con destino a Madrid, y nosotros dos, ya solitos, nos volvemos al hotel, aprovechando para patear algo mas la bonita ciudad de León, eso sí con un frio de cojones.

Mañana haremos la ruta que teníamos prevista para hoy, pero abreviada.

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